Noticia Destacada
Hospedajes de Chiloé se certifican para incrementar su rentabilidad
Tradiciones y Biodiversidad de la zona los hace idóneos para atraer turistas más exigentes – Sello “S” que desde mayo otorga Sernatur, garantiza que estos recintos fomentan el cuidado del medio ambiente.
Reducir costos, diferenciación y garantizar a los turistas, principalmente extranjeros, el compromiso con el medio ambiente son los objetivos que están motivando a los servicios de alojamiento de Chiloé a obtener el Sello de Turismo Sustentable (“S”), que el Servicio Nacional de Turismo (Sernatur) entrega desde mayo de este año, con el fin de certificar que estos establecimientos implementan medidas para potenciar el turismo verde.
Las empresas que cuentan con el sello “S”, no sólo pueden acceder a un nicho particular de viajeros, muchas veces dispuestos a gastar más durante su estadía -según la Organización Mundial de Turismo un 34% de ellos lo haría-, sino que también obtienen beneficios como una gestión económica, ambiental y socio-cultural “más ordenada y equilibrada”, dice el subsecretario de Turismo, Daniel Pardo, quien añade que certificar a empresas hoteleras del archipiélago de Chiloé, que hoy concentra el 25% de la disponibilidad de camas en la Región de Los Lagos, se ha convertido en una prioridad, debido a sus tradiciones, paisajes y biodiversidad.
“Durante el último año la capacidad hotelera del archipiélago ha crecido cerca de 10%, incorporando oferta de primer nivel, lo que se ha visto beneficiado por una fuerte inversión público-privada en conectividad y generación de oferta hotelera”, acota.
De hecho, Hoteleros de Chile estableció una alianza con Sernatur para promocionar esta certificación en sus socios “debido a la importancia que tiene este sello en términos de promoción turística y resguardo de nuestros recursos naturales. Este tipo de factores, sobre todo en turistas internacionales, hace la diferencia a la hora de elegir un hotel u hostal, y serán claves frente al estado del mercado hotelero actual en nuestro país”, sostiene Carmen Gloria Araneda, gerente de Hoteleros de Chile.
Nuevos clientes
Dentro de los seis alojamientos que han obtenido el “S” (Hotel San Francisco de Santiago, y Lodge Posada del Parque de Valparaíso, entre otros), está el Hotel Parque Quilquico (Castro), que cuenta con sistemas de calefacción en base a Energías Renovables No Convencionales y de optimización de agua.
Su gerente general, Arturo Pérez, comenta que estar certificado implica mejorar la imagen turística “ya que cada día el turista, sobre todo europeo y norteamericano, valoriza más que se respete el entorno de los lugares que visita”. Agrega que invertir en proyectos de este tipo, “traza los lineamientos que debería seguir la isla para incrementar el turismo, sin perder su belleza natural y cultural”.
Para Andrés Bravari, gerente general de Hotel Refugia, en proceso de certificación, iniciativas como el sello “S”, “son cada vez más necesarias y abren puertas para nuevos clientes”.
«la sustentabilidad es para todo tipo de hotel, no sólo para los pequeños»
«Además de beneficiar al medio ambiente, incorporar la sustentabilidad también genera beneficios económicos en los hoteles. En este tema, ninguno queda excluido, la sustentabilidad es para todo tipo de hotel, no sólo para los más pequeños o para un lodge aislado», afirma Eugenio Yunis, vicepresidente ejecutivo de la Federación de Empresas de Turismo (Fedetur).
De acuerdo al especialista, los establecimientos hoteleros, junto a cualquier empresa del rubro que implemente este tipo de prácticas, «comienzan a tener mejores resultados económicos al cabo de uno, dos o tres años, de forma gradual, gracias a un ahorro en los costos y al reconocimiento de parte de los turistas».
En ese sentido, Yunis destaca el caso de la cadena estadounidense Hilton, que tras incorporar medidas
de eficiencia energética e hídrica ha logrado ahorrar US$ 150 millones a nivel mundial en los últimos años.
Según el especialista, integrar estas prácticas «no es una obra gigantesca», sino una tarea que debe realizarse paulatinamente, acorde al tamaño de cada establecimiento. Es así como el primer año, pueden mejorarse, por ejemplo, los sistemas de electricidad y luego, fomentar iniciativas que beneficien a la comunidad local.
Pese a sus beneficios, Yunis señala que esta tendencia «aún es lenta en Chile, ya que si bien hay conocimiento sobre el tema, las empresas, destinos turísticos y municipios todavía no hacen lo que tienen que hacer para ofrecer una oferta turística sustentable, algo que también está retrasando la entrega de más certificaciones».
Fuente:www.df.cl