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LA ESPERANZA DE UN MOMENTO «EXPLOSIVO»

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Cumbre del clima: Con la mirada puesta en los países pobres .-

El derecho de algunos países ricos a seguir utilizando sus permisos de emisiones de carbono puede poner en peligro el progreso en las conversaciones sobre el clima que Naciones Unidas auspicia desde este lunes en la capital de Qatar, Doha.

Visto que el Protocolo de Kioto expira al final del año, varios países quieren extender más allá de la fecha señalada sus asignaciones de emisiones de carbono que no han utilizado.
Los activistas dicen que esta postura puede hacer que los nuevos recortes de las emisiones no tengan ningún significado.
Y hay temores de que las viejas divisiones entre ricos y pobres dificulten cualquier desarrollo significativo.
Se espera la llegada a Doha de más de 17.000 participantes para la 18ª Conferencia de las Partes (COP18) de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

VALIENTE ELECCIÓN

La elección de la sede para la cumbre ya generó sorpresa. Qatar, rica en petróleo y sobre todo en gas, tiene una de las emisiones de carbono per cápita más altas de todo el mundo.

Pero Nick Nuttall, portavoz del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP, por sus siglas en inglés), le dijo a la BBC que “elogiaba” el “valor” de Qatar al albergar el encuentro.
“Algunos de estos países que, en el pasado, pensamos que no eran serios sobre el cambio climático y que no eran partidarios de las energías renovables, están demostrando fuertemente que quieren ser parte de la solución”.
“Las señales que recibimos de las autoridades qataríes es que quieren empezar a actuar respecto al cambio climático y este puede ser su primer gran paso”.

Ser sede de una conferencia es una cosa. Asegurar el progreso, es otra.

La reunión de este año llega justo un mes antes de que expire el primer período de compromiso del Protocolo de Kioto, ratificado en 1997, el acuerdo mundial más significativo para la reducción de emisiones de dióxido de carbono.

El año pasado en Sudáfrica, los negociadores acordaron lo que se conoce como Plataforma de Durban. El núcleo de esto fue un intercambio: los países más ricos extenderían sus recortes de carbono más allá de 2013 por medio de una ampliación del Protocolo de Kyoto.

¿Habrá posibilidad de acuerdo en Doha?

A cambio, las naciones en desarrollo negociarían para 2015 un acuerdo que comprometería a todos los países, incluyendo a potencias emergentes como India y China, a reducir las emisiones a partir de 2020.
La llave para aquel pequeño paso adelante fue una “coalición de los voluntariosos”, una peculiar alianza entre la Unión Europea, pequeños Estados islas y los países menos desarrollados.

“CUESTIÓN DIFÍCIL”

Pero en Doha, algunos de los detalles más delicados del acuerdo tienen que ser definidos. Y están demostrando ser muy problemáticos para dicha coalición en particular.
Una de las preocupaciones gira en torno al “aire caliente”. Varios países de la UE recibieron enormes asignaciones de permisos de carbono que quieren trasladar a un nuevo período de compromiso.

Pero la escala del excedente, unas 13.000 millones de toneladas de dióxido de carbono, podría hacer que las futuras promesas para reducir las emisiones carezcan de significado.
“Muchos delegados no están de acuerdo con esta extensión”, dijo Quamrul Chowdhury, un negociador de Bangladesh que habla en nombre del grupo de los países en desarrollo.
“Podría ser una cuestión difícil”, añadió.

Tracy Carty, asesora en políticas sobre cambio climático en la organización Oxfam, coincide en que el tema del excedente de los permisos de carbono puede ser muy importante en las negociaciones.
“Claramente, para que el segundo pacto tenga integridad, hay que establecer límites sobre cuánto se puede trasladar de este año al siguiente período y hasta qué punto los países usan ese ‘aire caliente’ en sus objetivos”, le dijo a la BBC.
“De otra manera no vamos a alcanzar las reducciones de emisiones que necesitamos”.

Otro elemento crucial es el dinero.

Durante las conversaciones del COP15 en Dinamarca, en 2009, los países más ricos aceptaron aportar US$30.000 millones en financiamiento inmediato para el período hasta 2012.
También establecieron un Fondo del Clima Verde para controlar los US$100.000 millones que se esperaban recaudar para 2020 para ayudar a los países más pobres a mitigar los efectos del cambio climático.

FONDO VACÍO

Pero varios países, incluyendo a Reino Unido, Francia y Alemania, han sido acusados de haber reconducido el dinero que ya estaba comprometido como ayuda al desarrollo.
Según una investigación realizada por la organización Oxfam, sólo el 33% de este financiamiento climático se puede considerar nuevo.
El cambio climático está afectando a los glaciares de la Antártica.
Y sin dinero en el fondo del clima para después de este año, Oxfam cree que esta será la cuestión más complicada en la reunión de Doha.

Tracy Carty sostiene que la disputa puede obstaculizar las nuevas alianzas que llevaron a cierto progreso en reuniones anteriores en Cancún y Durban.
“En los aspectos amplios de 2015, no vamos a ver ningún momento ‘explosivo’ en Doha como sucedió en Durban. Pero con la economía nos encontramos en un cruce de caminos, este es un período en el que estamos llegando al final de una tajada de dinero y no sabemos qué hay en la mesa para el año que viene”, dijo.

Algunos, no obstante, mantienen la esperanza de que se viva un momento ‘explosivo’ en Doha, apuntando al hecho de que los nuevos líderes de China y el reelecto presidente de Estados Unidos, Barack Obama, están haciendo comentarios sobre el clima que inducen al optimismo.

“El presidente Obama señaló que haría algunos avances en relación con el calentamiento global”, dijo Chowdhury, “y el nuevo liderazgo chino puede estar dispuesto a alcanzar un acuerdo.
“Es mi opinión personal, pero queremos ver dicho progreso”.
por BBC MUNDO.

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http://www.bbc.co.uk

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