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La estrategia de Endesa para intentar viabilizar el proyecto Punta Alcalde
Tras el revés de la Corte de Apelaciones, la firma buscará comunicar mejor los impactos y beneficios del proyecto. Además, trabajará en un plan de compensaciones para la zona de Huasco, que comprende en total US$ 20 millones.
En una nueva estrategia trabaja Endesa, el mayor grupo eléctrico del país, para dar viabilidad al proyecto Punta Alcalde.
La central a carbón de 740 megawatts (MW) que la firma planea desarrollar en la comuna de Huasco, en la III Región, sufrió un revés la semana pasada, tras el fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago que anuló la aprobación ambiental que el Comité de Ministros le concedió en diciembre.
El tribunal de alzada determinó que esa instancia debe volver a sesionar. Principalmente cuestionó que el Comité de Ministros introdujera compensaciones que no se habían contemplado en el proceso de evaluación ambiental.
Entre ellas, validar el acuerdo entre Endesa y CMP, filial de CAP, para instalar un precipitador electrostático en una de las chimeneas que permita captar parte de las emisiones.
Sebastián Fernández, gerente regional de Planificación Energética de Endesa, quien tiene a cargo todos los proyectos del grupo, reconoce que el fallo los sorprendió y que la apelación que ya hicieron a la Corte Suprema busca reforzar “que el proyecto ha cumplido siempre con la legislación ambiental y que va mucho más allá de lo exigido por la ley”.
Agrega que la estrategia judicial también se centrará en que se ratifique el principio de compensación con el cual ha operado el sistema de evaluación ambiental. “Con la redacción del fallo no queda claro que el mecanismo de compensación en otra instalación sea una vía válida”.
Añade que el Comité de Ministros actuó de acuerdo con sus atribuciones, considerando que hay proyectos que han sido rechazados en la región y luego aprobados por esa instancia. “Hay precedentes también de medidas de compensación que se incorporaron en la etapa de revisión del proyecto por parte del Comité de Ministros. Es sorprendente el no considerar (el fallo) una mejora al proyecto o que la institucionalidad impida a un titular mejorar este proyecto hasta el último momento (…) Vamos a sustituir el total de emisiones de nuestra central con la instalación de un precipitador electrostático en una chimenea de la CAP. Esto es equivalente a trasladar la chimenea a 13 kilómetros de Huasco”, afirma.
Las compensaciones
Un segundo camino que impulsarán va por la vía extrajudicial. Tiene que ver con diseñar y desarrollar un plan de compensaciones sociales para la comunidad del Huasco, más allá de las mitigaciones ambientales. “Habrá que trabajar y es importante que se abran canales para desarrollar mesas de trabajos para establecer compensaciones sociales, más que ambientales”, indica el gerente.
En total, Endesa tiene previsto destinar para estos fines recursos por unos US$ 20 millones, que se suman a los US$ 30 millones que comprenden las mitigaciones ambientales.
Fernández aclara que aún no se han identificado las obras y las mejoras concretas que permitirán desarrollar este importe, pero afirma que ya han realizado un trabajo con las comunidades.
“Ya ha habido una serie de conversaciones con pescadores, habitantes y vecinos de Huasco, donde se han identificado cuáles van a ser las líneas donde vamos a orientar los esfuerzos, alguna mejora de escuela, de infraestructura, esas son las líneas de acción (…) Lo que hoy se debe definir es un mecanismo de regulación de estas compensaciones, estos aportes que tendrá que hacer la empresa a las comunidades, y una vez definido eso, probablemente ellos van a tener un rol muy importante de dónde se van a orientar los esfuerzos y los gastos”, asegura Fernández.
Esta estrategia también comprende establecer conversaciones con las comunidades que están detrás de los recursos judiciales, “aunque no tenemos claro cuáles son”, admite.
El ejecutivo explica que están conscientes de que para que se puedan desarrollar los proyectos energético en el país es clave que las comunidades sientan que también serán beneficiadas y que no sólo hay un retorno positivo a nivel nacional.
“Toda esta oposición que estamos viendo en el desarrollo de todos los grandes proyectos es porque se ve que el beneficio se lo lleva el país y no los afectados directos. Eso es un tema de foco que también debe solucionarse desde el punto de vista regulatorio”, plantea.
Por eso, Endesa considera necesario un marco más equitativo que defina las compensaciones a los más afectados más próximos a los proyectos eléctricos.
Cambio de foco de Endesa
Un aspecto que reconoce la generadora es que hoy no se puede desarrollar una central eléctrica bajo los mismos criterios que había en la década pasada, porque la sensibilidad social cambió y hay mayores resistencias, por ejemplo, a los proyectos que comprenden el uso del carbón.
Fernández asegura que Endesa está enfrentando de una forma diferente sus proyectos. Explica que antes los definían considerando el punto de vista técnico; es decir, “cuál era el más eficiente, el más económico y que de alguna forma tenía el costo medio más bajo”.
Esto se daba en un contexto en que las comunidades “veían todavía como un gran bien un proyecto hidroeléctrico. Cuando lo desarrollabas llegaban caminos, comunicaciones, salud, una serie de beneficios que antes no estaban dados y hoy están dados”, explica.
Ahora asegura lo primero que la compañía energética toma en cuenta es la línea de base social del lugar donde se emplazará el proyecto eléctrico. Este trabajo, sostiene, se debe hacer incluso antes de planificar la central eléctrica. “Esto tiene que ver con identificar cuáles son las necesidades y los impactos que va a generar el proyecto, de modo de mitigarlos desde el diseño. Es diseñar mitigando”, sostiene.
«Hay medidas adicionales que a lo mejor se pudieron incorporar antes»
¿Cuál es la autocrítica que hacen en el desarrollo del proyecto Punta Alcalde?
Hay una autocrítica y también algunos cambios de entorno que afectaron. Cuando ingresamos a tramitación este proyecto, ni siquiera existía norma de emisiones. La incorporación de esta norma obligó a hacer mejoras y modificaciones al proyecto, que obligaron también a retrasar y hacer distintos modelamientos de calidad del aire.
Luego se fueron introduciendo mejoras paulatinas que también mejoraron el proyecto que fue ingresado inicialmente. Después ha habido una creciente exigencia social para el desarrollo de todos los proyectos.
Esta autocrítica la asumo, pero no es tanto el caso particular de Punta Alcalde, sino que está pasando con casi todos los proyectos emblemáticos. No se ven los beneficios locales del desarrollo de estos grandes proyectos que son de alguna forma de interés nacional.
¿Por qué no presentaron desde un comienzo un proyecto más amigable?
Este es un proyecto que lleva más de cuatro años en tramitación. Hay un cambio de entorno que va obligando a hacer esas mejoras. Hay medidas adicionales que a lo mejor se pudieron haber incorporado antes, a lo mejor podríamos haber hecho algo antes.
¿Han sabido mostrar los impactos y beneficios del proyecto Punta Alcalde?
Esa es una parte importante de la autocrítica. Efectivamente, la labor de comunicar, primero, los reales impactos que generan en la zona, y luego los beneficios que acarrean estos proyectos.
Deberíamos haber acentuado todavía más ese esfuerzo comunicacional de incorporar cuáles son los beneficios que traen estos proyectos en la zona.
Estos no se han evidenciado a lo mejor en su momento y hemos permitido que se establezcan mitos.
¿Cómo cuáles?
Como que, por ejemplo, hoy Punta Alcalde va a afectar y empeorar la calidad de aire en Huasco. Esos temas a lo mejor les podríamos haber puesto un poco coto antes, porque después desmontar esa teoría que se convierte en verdad, a veces resulta más difícil.
Otros proyectos, como HidroAysén, enfrentan lo mismo...
HidroAysén tiene sus particularidades. Hay un diagnóstico bastante compartido en la industria de que tenemos que buscar mecanismos que permitan compensar de mejor forma a los afectados más directos o el entorno de más vecinos.
Eso atañe a los proyectos hidroeléctricos grandes como el que mencionas y otros, como a centrales termoeléctricas. Había un proyecto de ley que buscaba redistribuir equitativamente los beneficios de estos proyectos según los impactos que cada uno sufre.
¿Con las compensaciones se puede entender como que están comprando a las comunidades?
Eso es lo que se ha querido instalar, pero es más que eso. Con las compensaciones se está buscando reequilibrar equitativamente los beneficios de los proyectos de acuerdo con sus impactos.
Fuente:www.latercera.com