Intentamos desacoplar la planificación del ciclo político y, por lo tanto, tener obras para los próximos cinco años. La idea es llegar a un nivel de desarrollo del orden de US$ 2 mil millones promedio al año en licitación de obras y que cada proyecto responda a los beneficios sociales y económicos de acuerdo a la evaluación social del proyecto. Esa es la forma en que hemos creado esta cartera, que tiene proyectos grandes, intermedios y también posibilidades de ingresar otros, como los embalses.
¿Ya se definió qué embalses serán parte de la agenda de concesiones?
Hay un equipo de tareas, que lo integran ingenieros y economistas, quienes están analizando la posibilidad de hacer algunos de los embalses, del plan de embalses, vía concesiones, esto adicional a la cartera. El equipo está analizando el tema para entregarlo antes de la Ley de Presupuestos, es decir, antes del 30 de septiembre; una mirada acerca de ello.
¿Por qué se va a optar por esto ahora?
Tuvimos una buen experiencia en Punilla, pero, además, los ritmos de inversión que requiere un embalse son mayores a la disponibilidad presupuestaria que tenemos, porque la sequía es un fenómeno más intenso de lo que era 10 años atrás, y una forma de adelantar la inversión es través del sistema de concesiones, y eso esperamos poder llevarlo al Congreso en la Ley de Presupuesto.
¿Cuántos se van a concesionar?
Esperamos tener una mirada en torno a tres o cinco embalses, dependerá de cuáles prioricemos.
¿Cómo responde a la petición de los gremios de aumentar el ritmo de inversión en concesiones?
En 2017 habrá más inversión en obra pública que este año, independiente de la fuente de financiamiento, ya sea por presupuesto directo de la nación o vía concesiones, la suma total va a ser mayor. Además, hoy tenemos obras significativas en todas las regiones, algo que no se daba hace años. Eso es importante.
Pero, ¿cuándo se verá materializada esa inversión?
Las obras en concesiones tienen un período de desarrollo que es la licitación, luego, dependiendo de los distintos estudios de impacto ambiental y procesos posteriores, se va materializando en parte. Por ejemplo, el aeropuerto (AMB) lo adjudicamos en febrero del año 2015 y ahora recién está partiendo la inversión efectiva. Como esto va a ser permanente, lo importante es generar la inversión, por eso hablamos de una meta de US$ 2 mil millones en promedio anual.
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¿Cuánta inversión tuvieron que materializar en este gobierno?
En general hacia atrás el ciclo político marcaba la planificación de las obras, eso significaba que los primeros años de los gobiernos eran más difíciles para levantar proyectos. Eso es un error, y por eso lo que estamos haciendo es no sólo tener buenos niveles de ejecución cada uno de los años, sino que, además, con una planificación a cinco años plazo, este año mirando a 2021, en 2017 miraremos a 2022, eso permite desacoplar las obras del ciclo político y, por lo tanto, la concreción de obras.
¿Y en términos de empleo?
Haciendo un símil con Energía, cuando se hace una gran licitación de energía se sabe que el efecto en los precios se nota en varios años más, pero las decisiones de inversión que se asocian a esos precios son inmediatas; pasa lo mismos en infraestructura, la ejecución de una parte de estas obras demora varios años, sin embargo, desde el momento en que se llega al punto de no retorno, es decir, cuando se adjudica, se gatillan estos efectos económicos.
Entonces esto se concretará a futuro…
La cartera tiene una expresión de largo plazo, porque es clave para el desarrollo de la obra pública a futuro. El país va a tener un nivel de desarrollo importante en obra pública en la medida en que, junto con el presupuesto de la nación, tenga de manera permanente una inversión del orden de los US$ 2 mil millones al año. A eso se suman los mejoramientos como las terceras pistas.
¿Avanzará la tramitación de los proyectos de ley que buscan fortalecer las concesiones, como el que crea la Dirección de Concesiones?
Le hemos puesto suma urgencia al proyecto que crea la Dirección General de Concesiones, y hemos esperado hasta hoy, porque el tiempo invertido en lograr acuerdos es tiempo ganado; lo que hemos hecho acá es lograr acuerdos con los trabajadores e incluir las indicaciones.
¿Qué acuerdos se lograron?
Primero, logramos tener una indicación parlamentaria para tener una extensión territorial en las regiones, lo otro fue con los trabajadores de concesiones para mantener las condiciones laborales, que viene expresado en un protocolo de acuerdo con la Dipres, que se firmó hace unos días.
¿Y el Fondo de Infraestructura?
El Fondo de Infraestructura esperamos retomarlo en unas dos semanas más en el Senado, porque estamos por despachar la ley de agua potable rural. Vamos a ir paso a paso. En las ideas matrices hay acuerdos generales, pero queremos escuchar la opinión de parlamentarios para ver los temas más específicos; en estas materias nos interesa no aprobar con un voto, sino por acuerdos amplios, porque son políticas de Estado que trascienden a los gobiernos.
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Fuente:La Tercera www.chiledesarrollosustentable.cl