Conversación
Estrategia Nacional de Energía (ENE) 2012 – 2030
El desafío Energético de Chile: Fundamento de un país desarrollado
Chile se enfrenta al desafío de contar con recursos energéticos suficientes y competitivos para alcanzar el anhelado desarrollo en las próximas décadas. Un objetivo que está en el centro de las aspiraciones de este Gobierno y que beneficiará a todos los chilenos. Es por esta razón que el Gobierno ha querido proyectar el crecimiento de Chile definiendo políticas a largo plazo en materia energética, crecimiento que debe ser respaldado con energía limpia, segura y económica.
Bajo esta premisa, nace la Estrategia Nacional de Energía, ENE. Con el lema Energía para el futuro, la ENE tiene como finalidad adoptar una posición clara con respecto del desarrollo futuro de nuestra matriz energética, junto con las principales orientaciones y medidas para su materialización.Un documento de trabajo que prioriza las materias que deberán discutirse y avanzar en los próximos años con el objetivo de superar los enormes desafíos que nos plantea la demanda de energía.
¿Cuánta energía necesitamos? Actualmente el país cuenta con una capacidad instalada de aproximadamente 17 mil MW: 74% está en el Sistema Interconectado Central, SIC; 25% en el Sistema Interconectado Norte Grande, SING, y menos del 1% en los sistemas medianos de las Regiones de Aysén y Magallanes. Tomando en cuenta la tendencia de crecimiento económico al año 2020, se proyecta un aumento en el consumo eléctrico en torno al /hora. Ello representa el desafío de incorporar 8 mil MW de capacidad instalada a nuestro sistema.
La tarea es gigantesca al considerar que Chile es un país importador de recursos energéticos, cuyos altos precios han incrementado los costos marginales de generación de energía y el precio de la electricidad. Es más, nuestro país tiene uno de los precios de electricidad más altos de América Latina, superiores al promedio del resto de países de la OCDE. ¿Qué energía queremos? Si bien es indudable que el país requiere más energía, requiere de energías que además sean limpias y renovables, que además se encuentran en abundancia en el país, como es la generación hídrica y las ERNC. Pero muchas de ellas requieren de desarrollo y de un apoyo suficiente para permitir que su participación en la matriz sea cada vez más relevante. Por otra parte, no podemos prescindir de la energía térmica que permite contar con energía estable y segura para al suministro. Pero al igual como lo hemos venido haciendo en este Gobierno es fundamental seguir incorporando los máximos estándares ambientales y fomentando el ingreso de energías renovables a la matriz.
Desarrollo del sector eléctrico. El marco regulatorio del sector ha evidenciado importantes debilidades. Por eso es imperativo contar con un plan de acción que revise el diseño y funcionamiento de la institucionalidad vigente, así como de los roles de diversos organismos relevantes en el sector. Se deben generar las condiciones para una matriz más limpia, diversificada y segura con un mayor número de actores y redes robustas.
Se descarta por ahora la utilización de energía nuclear para la generación de electricidad, aunque se continuará estudiando y analizando la experiencia internacional para contar con la información suficiente para que los próximos gobiernos puedan tomar una decisión al respecto, con la debida participación y conocimiento de la ciudadanía.
Con miras de orientar la matriz eléctrica de la forma ya descrita, la ENE se basa en 6 pilares fundamentales.
1.- Crecimiento con Eficiencia Energética: Una Política de Estado
2.- Despegue de las Energías Renovables No Convencionales: Un Desafío Pendiente
3.- El Rol de las Energías Tradicionales: Mayor Preponderancia al Recurso Hídrico, Menor Dependencia Externa
4.- Nuevo Enfoque en Transmisión: Hacia una Carretera Eléctrica Pública
5.- Hacia un Mercado Eléctrico más Competitivo
6.- Avance Sostenido en las Opciones de Interconexión Eléctrica Regional
Fuente:www.minenergia.cl